martes, 17 de abril de 2012

La presidente ladrona de Argentina roba YPF

Como buena socialista, es ladrona. Como ya no tiene nada que robar dentro de Argentina, se dedica a robar fuera. Se aprovecha del trabajo y el capital invertidos por la empresa Repsol y una vez que le ha hecho la tarea se decide a "nacionalizar" la parte argentina de dicha empresa (YPF).

Y aún hay sinvergüenzas que la aplauden, incluso en España. Que no se trata de una cuestión de "patriotismo". Realmente da igual que la empresa sea española, argentina, estadounidense o mediopensionista. El problema es que ha robado el fruto del trabajo de otro.

La verdad es que la situación del mundo en la actualidad cada vez se parece más a la que explicaba Ayn Rand en su libro "La Rebelión de Atlas" (Atlas Shrugged) allá por 1957. Salvando las diferencias en cuestión de tecnología, los pasos son clavados. Lástima que Brufau, presidente de Repsol, no creo que sea un Ellis Wyatt y haga volar en pedazos todo lo que le quieren expropiar, que sería lo que debería hacer y lo que yo haría ("I am leaving it as I found it. Take over. It's yours" - Nota dejada por Ellis Wyatt una vez vuela los pozos que le querían nacionalizar). Realmente, tal como están las cosas, dicho libro está totalmente recomendado.

Y el resto de empresas que han invertido en Argentina, como Telefónica, que se vayan preparando. Yo de ellas sacaba todo lo que pudiese de allí y les dejaba "a su suerte". No merece la pena invertir. Eso sí, la prima de riesgo del país sudaméricano por las nubes. Normal. No van a volver a tener inversión privada exterior en mucho tiempo, y la interior es inexistente y lo seguirá siendo. Que se preparen, porque van a acabar siendo otra Venezuela o Cuba. Al tiempo. Es lo que tiene el socialismo: miseria para todos y robo generalizado. Pero ya le echarán la culpa al capitalismo y al "imperialismo", y habrá gente que trague.

La "montonera", como la llama mi amiga Anghara, se ha lucido. Pero es lo que hay, le viene en la ideología. Vergüenza de señora, de país y de ciudadanos que eligen el robo como forma de vida, en lugar de la creación de riqueza por el propio esfuerzo. Socialismo.

martes, 10 de abril de 2012

Unas cuantas razones para la desaparición de todas las subvenciones

Unas cuantas razones para la desaparición de todas las subvenciones:

- Al subvencionar usas el dinero que producen productos que sí son rentables para hacer competir algo que no lo es, es decir, quitas riqueza a quien la produce para hacer que algo improductivo se mantenga. Eso implica una doble pérdida de riqueza: la que se roba al que produce y la que se pierde al mantener algo con pérdidas compitiendo con ventaja.

- Subvencionar, por ejemplo, una tecnología nueva que aún no es rentable (por ejemplo, la energía solar) implica que no se va a seguir desarrollando. Si no se subvencionase, esa tecnología seguiría evolucionando hasta hacerse competitiva. En el momento en el que ya lo es de forma artificial (al haber sido subvencionada) no se sigue desarrollando, porque no merece la pena. Otra vez doble pérdida: el robo al que produce y el doble coste de dicha tecnología.

- Cualquier subvención provoca una burbuja económica, al hacer competir artificialmente un producto que no es competitivo creando una oferta artificial a un precio irreal. Esto provoca que, en el momento en que desaparezca esa subvención, la burbuja reviente, provocando un desajuste tanto más fuerte cuanto más se haya inflado dicha burbuja. Un ejemplo de esto puede ser el famoso "plan renove" de vehículos impulsado por el gobierno, y la crisis en el sector que siguió a la desaparición de dicha subvención.

- El mantener un negocio improductivo mediante subvenciones implica que la tecnología y la economía se estanque, al no permitir la desaparición de negocios obsoletos y su cambio por otros productivos.

- La adjudicación de subvenciones pasa por el capricho del gobierno de turno, que emplea el poder coactivo del Estado para privilegiar unos tipos de negocio a costa de otros, a veces incluso "a dedo".

Y, por encima de todo, la razón principal es que se roba riqueza de forma coactiva a los que la generan para hacer que los que no van a crearla sean mantenidos. Es siempre un robo, con el agravante de que ese dinero va a parar a negocios no productivos a capricho del gobierno de turno. Es una gran injusticia de base, da igual las intenciones que se tengan con ella, que genera privilegios para los que no crean riqueza a costa de los que sí.

Así que creo que ya va siendo hora de que se terminen ese tipo de privilegios. Basta ya de subvenciones.